He tenido una estancia agradable y me encantaría volver. El hotel era el lugar adecuado para, además gozaba de una zona segura, a pocos pasos de la naturaleza y del jardín. Mi habitación con un balcón, vistas impresionantes y también un dormitorio era lo suficientemente espaciosa, dormí estupendamente. Los desayunos aquí eran increíbles, con mermelada, croissants y también pan casero.

Las habitaciones son bonitas y grandes con balcón, cocina, y ducha; la ubicación cerca de las montañas y el jardín es ideal.

Había una buena cantidad de comida en el desayuno, como croissants y queso. Nuestra habitación era enorme, lo suficientemente espaciosa y contaba con tanto un balcón como un baño independiente.

El hotel está ubicado al lado del lago y cerca de un jardín, en una región preciosa. La suite estudio era espaciosa, con una cama muy cómoda. El desayuno ofrecido fue increíble.